miércoles, 15 de mayo de 2024

La carta de lluvia fue un salar

A veces posa mirando de costado, buscando la mirada infinita.

Binarios animales se posan junto a ella, en simulación constante.

Demasiado de otro lugar para estar acá. Y este ensayo de otoño, que se  acerca  al día en que germinaste, es mas frio de lo acostumbrado. Se susurran palabras invasivas y hay un silencio cómodo que divide.

Posible lentitud. Lento madurar. Recuerdos de una placentera geometría que se desliza hacia al lugar que se acuerda. Ojos que se encuentran antes del tibio panal de labios.

Hoy, solo hay tintas invisibles en esta carta de lluvias que se convierte en salar.-


viernes, 3 de mayo de 2024

La invisible imposibilidad de encontrarse en otros

Y en la custodia fantasía de volcanes e imaginarios de peces. 

El gesto desparramado de desconocerse entre perpendiculares avenidas y triángulos que no se quieren acomodar.

La centinela coincidencia nefasta que no se busca ni se necesita.

¿Prolongado simulacro de huir del sol de la ventana mientras este interlineado encuentro de sonoridades, que buscan ser frases al latir? Sueñan la invisible imposibilidad de encontrarse en otros.

Esta hoja blanca se llena de silencios incomodos que se suman y multiplican. 

¿Mutación de pájaros y conejos videntes?, ¿Cadena de molestias que no entienden que deben ser prisioneros de la razón, que es más simple y ordenada? 

Simetría que trae la paz, en esta delirante ciudad donde el tiempo gemelo brilla por su ausencia.