(Titulo robado a Redolés)
El presente se siente a gusto cuando el bolso se lleva bien y la bodega esta completa.
De ahí al experimentar, buscar por medio de entrecruzados objetos y vocablos la oración que traslada los pies a la orilla del mar. Vanidad - búsqueda de expresión - Imaginería crónica. Nominaciones sobrarían y bajo cierto prisma todas son palpables, pero, aun así, en el tocar el techo de aquella imagen, aquel relato que comienza todo el flujo inconsciente que gira en derredor. Solo serian colores, colores, colores.
La confusión sutil del recuerdo y el amago de poema que se cruza uno al caminarse una calle o ver a un viejo dibujando relatos en vidrio. Presumirían preguntas, vestigios de latas y papeles húmedos, cuentos a medio terminar. Pálidas caras cocinando charquicán en alguna habitación subarrendada al destino. Bufandas a medio cocer, tejidos a medio vestir, películas a medio contar. Pro actividad de cantico de Muchacha con el labio inflamado, condenada a seguir escuchando notas que emergen de ningún lado, condenada a llorar de emoción ante el aletear de algún pájaro y un hombre vomitando conejos. Caminatas, canciones, historia discontinua y de narraciones múltiples. Origen del invierno en el agua que todo lo consagra, consumo de sal, litera de otoño gris por tanta botella acumulada.
Buscaremos agachados en la cocina un trozo de carne frio, esperando la tocata de una banda que solo imaginaste de borracha y me reiré y te enojaras y lloraras y ¿Qué tanto si ya paso?
Frases y encuentros que/Nunca/se pasaran/Olvidaran/recordaran. Porque el hecho que te pidiera que NO te quedaras, NO implicaba que te fueras. Seguiré erguido acá, en esta misma calle, en esta misma vereda, con los lentos fragmentos de nuestro entierro que aun se sienten tibios.
Malos vocablos, miedos idiotas. Poca habilidad para contenerse y saber cuidarse. Tú tranquila. Yo contento, mientras me soporto a gotario y toneladas de humo invisible y sabia que tu ya conoces. Palpo de a poquito el lapicero de lápices invisibles. Tallando cunetas, flores y ocasos. ¿Solo debería creer?
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