Occidental de 2da Mano
Fragmentos de una novela que no existe.-
miércoles, 24 de septiembre de 2025
¿Perdi las piezas que nunca me faltaron?
miércoles, 17 de septiembre de 2025
La Pérdida póstuma contra todos los Miedos
lunes, 15 de septiembre de 2025
El Arquitecto de la Miseria
viernes, 12 de septiembre de 2025
En ti residen todos los escritos y versos mudos
Volviste a visitar los viejos lugares. Volviste a mirar la ventana que profetizaste cerrar.
Volviste para dejar tu intenso aroma a cloro, lavazas y estridentes poemas no escritos. Volviste evitando parir letras nuevamente o conjeturo que sigues recordando otros inviernos de poca luz en transito y pavimento de nuevas hojas.
Volviste por que en ti inciden todos los símbolos y muñecos de madera abandonados en plazas. Volviste por que en ti no existen las sincronías mal llamadas casualidades.
Volviste por que en ti residen todos los escritos y versos mudos. Volviste por que sea como sea cargas con largos diálogos y celulosas. Son tu herencia, no necesitas actualizar por que estoy seguro de que estas tremendamente vigente.
Volviste por que siempre fuiste mujer que yo no supe entender, no comprendí los verdes gestos e innominables atardeceres celestes. Solo fui espectador torpe, que a pesar de que se cumplieron todas tus predicciones sigue llevándote.
Volviste y te debo contar que nunca pronuncie tu nombre como pediste, solo lo traduje a idiomas desconocidos que se escriben con tinta invisible. Busque incansablemente los cabellos que arrojaste al mar y me abandone en una cita inconclusa cebando mate y comiendo frutos secos en ese parque que ambos sabemos.
Volviste sin costras en tus rodillas, ni lunares ni cabellos lila. ¿Tu risa aun mantendrá su escandalo que genera mariposas y resucita a los difuntos errantes?
Volviste y tu estética ceniza me incita a vomitar corazones...
¿Volviste?
lunes, 1 de septiembre de 2025
Elegida Inelegible
Mi viento no chocara con tu viento. Violento testimonio de tormentas que no ocurrirán pero que se buscan. Besos de acuarelas que borrara esta lluvia que aun no ocurre.
Me quedare con la boleta de garantías a la mordedura de tus frutos de plata, tu dulce cintura de páramo y la fallida excursión al asterisco que todo lo desea y contiene.
Y aunque tal vez en esta noche nublada te pierda de vista en estas espesas arenas. No puedo dejar de dibujarte estelas con mi farol de libélulas, tratando de encontrar y desdoblar este destiempo. Buscando el momento antes que todo te ocurra, antes que todo nos llegue. Y finalmente me deberé entregar a la condena que silencia nuestros diálogos. La condena que me exilia de tus valles y el habitar que tanto deseo en ti.
Nunca podre aprender ha amortiguar frases, ni hacer fintas a las abejas del jardín que con esmero cuidas. Tampoco me enseñaras ha relacionarme en planos silenciosos o escenas posibles tomando el ardiente té de tu vientre.
No conoceré nunca la peligrosa forma de corromperse y que solo se escribe en esta lectura caliente e imaginativa. Premisa del agónico y largo suspiro que precede a esta muerte.
Solo me queda la residencia en la geometría de lo inelegible.
martes, 17 de junio de 2025
Extraño reptil vestido con las espinas de un arcoíris
Estoy Descargando The Piper at the Gates Of Dawn
Con el pelo hasta el borde abismo señalando que más al sur la reja de cemento hace limite con la botellas apiladas y ya bebidas tiempos antes por otros, que al igual que los otros futuros intentan descifrar estas viejas cintas de cassettes Cromo II. Desmenuzando la imaginaria iguana vestida de espinas de arcoíris para el tardío efecto de la pastilla vencida y el incomodo viaje inmóvil plagado de distancias y águilas plásticas que nos advierten que en la cima todo se convierte en sonido, el sonido en acorde y el acorde en absurda boleta.
Estoy descargando Atom Heart Mother
Siento las manos frenéticas, calientes de grandes gestos y sobremesas de tallarines y salsas con laurel. Acompañados en un vacío apoyo de libros insistentes y desnudo el cuerpo al silabario de esta montaña de corazón atómico, con gusto a pezón de azúcar y la postergación de los códigos para lograr divisarnos. En ese vacío futuro, en la casa de mi abuela, recordando los enterrados en bolsas plásticas y los huesos que sirven de adorno para pegar las nubes del retrato de lo nuevo y que tarda en llegar.
Y se nos van los símbolos, aleteando hasta los cielos que aun no se construyen, pero que en densidad nublada de septiembre albergaran a las plagas de avispas rosadas, para la temporada del verano.
Y lentos brotes de otros sonidos y otros acordes invitan a este baile enfermo, frenético y sin sueños concluyentes.
lunes, 10 de junio de 2024
El estallido de sus colores
Su figura se dilata en la mano y en
la mano, del pajarillo perdido en la lluvia.
Detenida en una escalera frente al
mar, posa exquisitas telarañas en sus piernas. De su desinflamado labio,
se tejen versos, estenopeicas pinturas y visiones con olor a viento de lluvia.
La paloma del destiempo, aletea frágil entre cintas de cassettes, en una
primavera seca y muda que cruje entre el dolor o el delirio.
¿Etiquetado invisible de un juego
que divierte? ¿Banalidad de amantes imaginando charquicanes, cerca de la
medianoche?
Callejeo incesante, fotografiando
con los ojos una ciudad de atardeceres en bucle y un chocolate pituco a medio
compartir, a medio conversar.
La última voz habla de cauces,
árboles y posibles pájaros. Prisioneros de la misma nostalgia y la
luz que se estanca.
El estallido de sus colores no
sufre de amnesia.
viernes, 7 de junio de 2024
Violento Collage
¿Y si no queda día para cuando el pétalo mire sus colores?
¿Ni hojas blancas, para el ahogado sonido de almohadas crudas?
Si hay un cansancio de alojar hormigas contestarías en el proactivo campamento de las uñas y en su defecto no baste el susurro de los álamos para llegar a la entrega que nunca llega.
¿Tomar toda la tierra, y no mirar atrás? ¿Solo seguir los espejos y no morir? ¿No pensar en los pasos ni en las rutas o las distancias, solo caminar?
Por que la única profecía que se cumple para los que no tienen esperanza, es que el suspiro mas largo precede a la muertemiércoles, 15 de mayo de 2024
La carta de lluvia fue un salar
A veces posa mirando de costado, buscando la mirada infinita.
Binarios animales se posan junto a ella, en simulación constante.
Demasiado de otro lugar para estar acá. Y este ensayo de otoño, que se acerca al día en que germinaste, es mas frio de lo acostumbrado. Se susurran palabras invasivas y hay un silencio cómodo que divide.
Posible lentitud. Lento madurar. Recuerdos de una placentera geometría que se desliza hacia al lugar que se acuerda. Ojos que se encuentran antes del tibio panal de labios.
Hoy, solo hay tintas invisibles en esta carta de lluvias que se convierte en salar.-
viernes, 3 de mayo de 2024
La invisible imposibilidad de encontrarse en otros
Y
en la custodia fantasía de volcanes e imaginarios de peces.
El
gesto desparramado de desconocerse entre perpendiculares avenidas y triángulos
que no se quieren acomodar.
La
centinela coincidencia nefasta que no se busca ni se necesita.
¿Prolongado
simulacro de huir del sol de la ventana mientras este interlineado encuentro de
sonoridades, que buscan ser frases al latir? Sueñan la
invisible imposibilidad de encontrarse en otros.
Esta
hoja blanca se llena de silencios incomodos que se suman y multiplican.
¿Mutación
de pájaros y conejos videntes?, ¿Cadena de molestias que no entienden que deben
ser prisioneros de la razón, que es más simple y ordenada?
Simetría
que trae la paz, en esta delirante ciudad donde el tiempo gemelo brilla por su
ausencia.
viernes, 12 de abril de 2024
Galaxias maculatus
Hay una subversión de parafraseos e idiomas poco duraderos. Hay un sentir tembloroso de neblinas azules y un sonido que se extingue a la breve distancia. Hay un pasear que sirve de puentes que no se cruzan, silbidos inexistentes y un miedo mudo de poblaciones absurdas, paralelas al triste cadáver a la orilla del rio.
Suenas a una distancia razonable, posando entre letreros, con un sangrante corazón.
Hoy cargo una crisálida invisible que simula tu cara. Haciéndome creer que hablamos el mismo lenguaje de semilla, pero los vientos que USAMOS de interpretes dialogan en opuestas cardinalidades.
Y la risa se convierte en huracán.-
viernes, 24 de noviembre de 2023
La post - depresión no va a terapia
Hoy descarto la instancia que me lleva a todos los vacíos.
Establezco el itinerario de la ruta a la vacante inconstante. La perpleja sensación de abrir el cajón de torbellinos y encontrar los tiernos conejos que guardaste en el imaginativo del ocaso.
Esa larga escena donde todo se iba al sur, o al norte, según se mire. Lamento decir que esta brújula no obedece los usos y horarios, pero te dejo este borrador del deletreo de las soledades que juntas, comen pan caliente y té a medio servir.
Me alejo de la risa tonta de celebrar tus pies descalzos, tus visitas a los hielos y al simulacro de tu pelo corto. Por que mi pasado y tu pasado ya no dialogan hirviendo el presente, portando las temperas de una historia que no fue. Tú estas en una esquina adiestrando cocodrilos con los dientes. Y mi yo, con minúsculas, eleva palomas en desacierto. Buscando la perspectiva geométrica inútil, por que como se dijo, estas soledades asimétricas no son pieza de Lego.
Y eso es todo.
martes, 31 de octubre de 2023
El Vacio
En este vacío caen ordenados y en clasificación
todos los retazos de tus ausencias.
Apilados como pirámides de recuerdos
que no se dicen, ni se cuentan.
Pertenecen al idioma de otros.
En este vacío se acumulan las desesperanzas
y los cientos de bocetos
que juntos imaginamos posibles.
En este vacío se arrojan esas caminatas
recreando desayunos y las hallullas tibias
que acompañaron los diálogos que
no se alcanzaron a terminar.
En este vacío se queda la violencia imposible,
la desafiante pelea y el arrojo de piedras al atardecer.
En este vacío, el brutal presente de tú no estancia,
lastima mis flores casuales.
En este vacío se reúnen los kilómetros ebrios de nada.
Cargando blancos animales, que fueron inmunes al verde
que lucha contra la arquitectura brutalista que nos rodea.
En este vacío, al cual me entrego a abrazar,
porque es lo que tengo y que va
conmigo desde las mas antiguas infancias.
Vacío al miedo corrosivo de sentirse solo
y estar solo, por que nos gusta, pero nos da miedo.
Bucle vacío con cual se convive. pero ya no.
Te acepto como mío.
No te veo, pero se que estas ahí.
martes, 17 de octubre de 2023
La Portadora de temperas del pasado
¿Se lastima una fruta y se violenta el margen que divide lo abstracto y disoluto que significa ser fruto y flor frente al mundo?
Si la respuesta tiende a un resonar cubico, marchito de quejas, polvo sobre la balanza. Y mi aferrada esperanza se pierde en este dolor en retraso. A medias de escalera, de nombres y sugerencias. la merienda inoperante de muros intransitables y este invisible diccionario que no me da la semántica para esta agua tan profunda.
Me abruma pensar en que el barro que parte después del aguacero y transita entre amarillas hojas y plazas posibles, no recordara el paseo vago, triste y en un subarriendo al aleteo húmedo de este jarrón de avispas.
¿Fuimos solo un aliento de seguir el difícil y estrecho caminarse sin el espejo en la uña derecha? ¿Sirve aun, buscar el rito que haga la cuadratura de todas las esquinas como se busca un imprevisto ciego o tratar de escarbar en la piedra angular de este insensato pecho viejo y crujiente de recuerdos?
Solo a lo lejos y haciendo un maldito esfuerzo, logro divisar al pájaro dormido que se imagino siendo pájaro en otro árbol, en otro verbo.
Y en esto fluye el ahora. En un tonto miedo de advertencias y deudas y desdichas y pocos talentos y por fa, trae la boleta con todas las garantías y el mapa que se completa en la lectura de estos blancos pasos con sus frustraciones al azar.
Ya no llega a mi el eco lejano de los que algunos hablan. Tan lejos me siento que ni con tu salto imaginario logro el puente a los recuerdo de mejores tiempos y campos de pasto.
No, para cuando te acuerdes. Ya no quedara leña para este ultimo mate y guaridas de piedra para este sol de carreteras.
Guárdame la vida en una bolsa y recuerda conmigo ese Binomio no resuelto. Trae hasta mi el anillo que vendiste en un remate, atorada en pasillo de oro barato, donde la música se graba y exhala a borde lanas, fierros y amigos de otros tiempos en esta ciudad de cientos de gaviotas, cuerpos y dolores.
Ya no hay fuerzas, soy la presa extenuada del miedo y el máximo demonio de la infancia se hace presente.
Me dicen con banderas de animo que me deje llevar por la marea. Pero yo no se flotar.
Y me autoconvenzo que mi voz no te alcanza.
domingo, 17 de septiembre de 2023
Geometría del desacierto
Vivo en esta plaga de débiles formas. El intransitable deambular a la limitada alfombra de tus recuerdos, se vuelve y me golpea. Abre las ventanas de esta tinta negra y el archivo invisible de esta incumplida promesa expande esta verde mancha.
Y esta suerte no escogida, más estas insistentes flores en tú bando y la suma inscrita al club de los verdes pájaros, que cantan tempera y escape en el funeral del delirio de estas letras. Son la diapositiva constante de la imagen mal impresa de mis miedos, ansiedades y deseos reprimidos. Puedes levantar la rama del triunfo en eso.
A tientas me aferro a una luz que no tiene túnel y el abrazo que se imagina en este blanco canto de girasoles. Me rindo a la rabia de entender que cambiar es mas lento de lo que se pensaba. Y es posible, que ya no llegue a ese baile con tu encargo. La fruta y los tornillos de mi bolso se pudren y oxidan. En mi camino por las calles, soy yo el que huele raro.
Ya no quiero el vicio de la culpa y el emblema coronado de este fotograma en bucle. El giro latente y la carrera de la circunferencia que pasa por ti y ese pasillo de ambulantes con electrónica barata y desechable.
¿Puede que ya no quede sol, lamparas y cables USB para cuando el pétalo mire estos colores?
Si aun tengo estas hojas blancas, para el pétalo reservado de tu pared cruda y sin sonido. Y si no me he cansado de alojar hormigas contestarías para tu alegato sobre una línea del tren.
Ven y trae los símbolos que quedan en el campamento de tus uñas. Hay un pequeño susurro gris y ese viscoso aceite de los álamos que habitan en espiral al frente de tu casa.
Hoy arrojare tierra sobre mi cabeza. Si tengo suerte, puede que salgan flores.
martes, 12 de septiembre de 2023
Y este es el último poema
Saber pedir, saber buscar, saber esperar. Encontrarse en la dicotomía del desencuentro y encontrarse de golpe con este tiempo lineal e inabarcable para la espera de este rescate que solo llegara y todos tenemos ticket de entrada.
Y la fuga del sol y el viento que todo lo juzga y perdona al hermano y hermana que ignoraba nuestro cariño. Sentimiento que no implica marcas de titularidad.
Vueltas, vuelas, leñas, construcciones en busca del signo que todo lo habita. Búsqueda del continente que ayuna todos ocasos.
Búsqueda del pueblo que llama a todas la puertas, recibe la piedra blanca que tienen es sus bolsos y convive en la harina de salares. Porción oscura de un pan que quite las entrañas del hambre, ruego ceniza en los cabellos de la tierra.
Arriendo deshabitado en un pecho donde todos los nudos proceden del mismo origen, del mismo barro, de la misma piel.
¿Qué sabes? ¿Qué sientes? ¿Qué aguardas?
La llave solo existe si muestras tu cerradura, pero tu frontera de eclécticos lenguajes. Solo limita la mano del que todo lo provoca, no por que no pueda, si no, por que se necesita que tengas el mérito y basta de fosilizar las entrañas del tiempo, basta de incorporar cementerios a la garganta de esos que sangran, en ese mismo disfraz de lluvia y hervideros de comida.
Sentémonos en la misma mesa que todo lo comparte. Toma la mano y ven, solo sale. Veamos el árbol, con su destello y la primera luz. Que supera la medida espacio, tiempo y solo hay paz, solo hay paz.
viernes, 8 de septiembre de 2023
No se nadar entre los avisos
¿Recordaras aun el destello lejano de divide el tiempo y el recuerdo?
¿Aún veras al guardián que precede de la llave que solo se abre en nuestra presencia y que si agitas las manos tú latir no será suficiente?
Resúmenes para los que esperan la transformación presente del plano nivelado en el cual convives. Es por ello y lo otro que la atadura de uñas y venas no nos acontece.-
Tú me hablas de recuerdos y latires en ausencia de pecho para reflejar la miseria de todos en el otro. Buscar el refugio que permita flotar sobre la hojarasca de nubes que se nos aproximan para hablar del vivir y el sentir, ya que la costra del amor es un estandarte que marca a todos.
¿Buscar el designio? ¿El pasaje que nos lleve al rescate de ese estado sin frutos, la salida aquella parcela de arena?
La seguridad que nace de la pregunta que no se contesta o si se contesta no estoy listo para ella. A veces siento que nunca estuve para ti. ¿Qué tan abiertos están los horizontes para que el alba no te enceguezca? ¿Iras en busca de las cimas, iras en busca de las patrias, de las gentes, de los Padres y Madres?
¿Esperas que estén ahí, en uno, igual a tú? No pienso en esta pregunta incontestable, pero si pienso en qué si aun estas ahí.
No tengo las señales, y la Bip no me carga.
jueves, 31 de agosto de 2023
El viento rojo sembró pestañas en ella
Adivinanza de sangre. Flujo de animitas extenuantemente tristes sembrada de peluches húmedos y una que otra vana esperanza.
Marcada y violeta marcha de carruseles oxidados y penumbras de color tiza, agua, harina y madera que cuidan la ternura poca que se vierte en pleno, desde los largos cabellos del cielo.
Quiero guardar y cuidar la leudante fantasía que surge del tocarse hasta el pecho las venas, la hemorragia de panales y ceras de este Cosmopolitan brebaje de yerbas, que a duras penas conviven en ese espacio ínfimo de la memoria.
Adivinanza sangrante de la criatura que fue agua y ceniza que se fuma tus manos, tus entrañas y sol vidente de la nieve.
Trátame de loco. Trátame de tierra. Acompaña este cultivar la ultima cima de todas las águilas. acompaña a salvar la ultima flor que nació del viento sur. Acompaña a jugar con diarios y lanas la ultima bufanda del ocaso. Y si nos pasamos, cuando se nos acaben los higos y estos piñones imaginariamente posibles de tu horno de amores. Apaciguaremos la anhelada lluvia de abril. Sera fiesta para ventilar mis hojas en tiernas piernas y armar y desarmar mis misiles que provocan calambres al pecho, al corazón, a la ventana. Podremos cocinar vendavales de colores sujetos a la disposición que el viento nos pinte y escriba. Bailaremos juntitos la ultima canción que compuso el mar mientras la vieja peluquera del puerto vuelve a vestir y renacer a alguna niña con crisis de ansiedad en busca de la paz, que provoca la brisa y la remolacha de peces al oriente del pacifico.
Renacerán los frutos que el suelo flojo olvido y convirtió en arena infinita, y crecerán los trenes, los aviones y los ángeles que bailan cumbia, fluyendo del juego de manos, que produce el ser más inimaginablemente perfecto que jamás se nombra.
Con eso me voy. Qué sea lo que sea.
martes, 29 de agosto de 2023
Larga escena del ocaso
¿Y si tu verdad se equivoca?
¿Si tu postura de estancias en desventajas solo significa cenit de este preámbulo?
Que somos si no más que migajas de aire y un orgullo de pared gruesa que nos separa del grito que todo devela.
¿Estarás ahí cuando tu fotograma se revele? Si tu lugar es mi lugar y tus manos son mis manos, imagina conmigo esa larga escena del ocaso entre divisiones y piel.
Vuelve tu mirada y despoja la costra que todo lo contiene. El amor no tiene apellido.
Suéñame, búscame, espérame. Que si bien para ti soy mas hoja que leña, dame el tiempo para entender el ciclo que desbloquea el sueño. Dame el tiempo para preparar el ultimo escrito, si ese que valga las penas, las uñas, las lagrimas, las fotos, las imágenes, los arriendos a terceros, eso y mas orígenes.
No mires por favor la sal que sale de nuestras sombras. Enséñame a perder el miedo. Transmutemos su giro en múltiples nubes que rocíen tu pasto y mi pasto, mientras muevo ese triangulo al costado, para llenar de flores al guardián de ultima lluvia.
No cedas. No mueras. Solo ríe. Que el ángel que lo todo libera, ya nos toca la espalda. Y la lluvia cae sobre ti.
lunes, 28 de agosto de 2023
Metafísica para pájaros
B y D juegan a calcar espejos en su pechos. Descubren que en el proceso de flor, que asemeja la creación de dos manos que se unen en carne y éter, se vislumbra el horizonte del paraíso a recobrar. Alunizaje de caricias semejantes al tacto de Dios.
Para B, esto es incomprensible, ya que el único lenguaje que se fabrica esta en su cuerpo, en su sentir, en su abecedario recobrado en danza corpórea. Anteriores al viejo idioma de los arboles del caos.
D, por otro lado reconoce ese latir en el delicado momento en que se gesta el presente. Su cantar, liquido iniciador, forja la alquimia de elementos, que unidos crean el portal - umbral, del tiempo - cuerpo - principio.
Sabe que de la búsqueda y unión de la danza finita de su compañero, trizara los vientos que nominan a los peces allá en el frio hemisferio que los abraza.
Sabe que de la marcha vigilante de las aves del hielo, nacerá el huevo que todo lo completa. Complementación de fierros y esculturas obscenas. Idolatría gastada de deidades decadentes y profecías de falsa factura.
B y D, sienten la inocencia que procede de las fosilización de los sudores y fluidos en manos de calcio. Misma escritura en corteza de casas herméticas, cuidadoras de la primera cría del tiempo, objeto palpable en el olvido en piedra caliza y de montaña.
Viven el momento, cuidadosos a la fragilidad que asemeja a un par de tréboles en el invierno, temerosos de la destrucción que simbolizan. Sustentan juntos el jardín que divide el cielo de los que solo miran la piedra que envuelve.
Juntos llevan la tempera que todo lo renueva, eclipsando al alba de los pulpos.
Vende paltas y bolsas de plástico que bailan y fluyen entre los edificios.
La irrelevante sensación de sentirse frente a una oscuridad de sin sentidos. El recuerdo, de la posible visión del poeta de piedras frente al demonio cósmico que bloqueaba el recuerdo del futuro.
¿Cómo fotografía de viejo azul con guitarra sobre un puente, recordando, desde la no vivencia-vivencia que resuena en la imagen a medias vista en un parque de estatuas por el dolor que ocupa en la mente-memoria de la niña - flor?
La imaginada imagen de si misma, abrazada a una marioneta de papel, errante-errando, entre una chasquilla de papel lustre, tiza y lápices grafito con la pintura poema de lo no consumado. Sentado entre piedras, azucarando la boca entre tertulianos y ex -alcohólicos.
Se acomodo los recuerdos y el bloqueo de las intenciones por allá, las lejanas y oscuras venusianas errantes difuntas danzantes.
Y el yo en intento desapegado, por mientras, la sonrisa y el que se imagina paseando los gatos con algo de hambre de curiosas alpargatas entre fiebres, y la consulta al espíritu, del hijo del comerciante que se parece a Nietzsche. Vende paltas y bolsas de plástico que bailan y fluyen entre los edificios.
¿Si el castigo y la acción se encuentran mas allá del bien y el mal, pero conocemos que en el horizonte pegadizo de esa brote que imagina flores que siguen el brillo del sol y el perdón, la rabia y el consuelo, se esconden o disfrazan mientras confundidas las mariposas vuelven a morir y aparecer en el ocaso de octubre o septiembre o noviembre o diciembre.?
- No lo se - me dice, pero en diciembre las paltas suben.
Corónate
Corónate ¿Qué importa?
Puedes llevarte la sangre, las leyes, los gatos, los
cactus, el diario.
No importa. Corónate y sujétate las venas, por que poca cuerda le queda a tu carretera de colmenas, agrias verdes, irónicamente bien hechas.
No importa. Corónate. Y si quieres puedes batir tu corona a punta de pezones y almas convertidas en aves. A punta de de caravanas de niños que gimen y ríen y cantan tus aletargadas oraciones con olor a camisa y ropa húmeda al lado de un mal fuego.
Extinto humeante, doliente cegante.
No importa Corónate.
Y si, llénate la boca con toda la bien fluida carretera de elevaciones y vapores astrales prediluvianas.
Si llénate la boca a punto de neuróticos visionarios, locos en la prosa incesante del no recuerdo - visión del futuro.
Goza sabiendo que sujetos al prisma delgado de dejar y soltar lo que no se escoge se anhela. Compartiendo el humo de boca en boca hasta la amnesia, hasta el principio paragua de la alquimia de tierras y seres y flores que consumen tu ya, vieja greda de salares.
No importa. Corónate.
viernes, 18 de agosto de 2023
Aprendi a tocar el fondo y escapar
Me escape a la ultima flor verde del camp0. A lo lejos unos niños azules gritan el nombre del que ya no se recuerda.
Ya no quiero ser el mismo de antes. Ya esa imagen de probable alado fue quemada con el ultimo suspiro del mate.
¿Cebemos este olvido? - ¿Viviremos el vivirse? ¿Ajenos y perdidos a esta insuficiencia de ganas? No hay ecuaciones que resuelvan esto que nos falta.
¿Seguirán haciéndose invisibles algunos mientras
devoran hielos multicolores?
Y este escape a la ultima flor verde, que aparece en su mano con esa infinidad de pétalos y construcción de alas y metales a la espera del dibujo de la lluvia que cierra todos los escapes. Como si nos llegase a sobrar alma.
"Nada se pierde todo se transforma" - Se grita y se inventa en este plagio de todas la veredas de este escape, en el que tocar fondo tiene sentido. ¿Si en ti el juego del arcoíris que nos recuerda el pacto me causa emoción?
Si la piedra negra aun no acontece, ¿por que torturarse con el aquí y allá?
Busquemos el escape que mira conmigo el libro de todos los enigmas y pintemos las caras de todos con sus colores. Que importa si el agua no da para todos, si en una pequeña gotita se contienen todos los ríos.
Si en ti, en mi y en todos se guardan fragmentos de la del TRUE. La sangre nos tomara en espíritu y panes para la trilla que nos brinde el escape de múltiples harinas al campo.
No conozco lo que va, ni lo que viene, solo se que entra mas arena en mi cabeza y las gaviotas que la habitan buscaran otro refugio.
Solo se el amar de esta piedra por lo que es y este escape. Hay mas
verdad en mi que si le agrego lo que yo quiero que sea.
¿Por qué quererse, sentirse, no implica recibo de
pertenencia?
Solo tengo la certeza que ya no recuerdo tu
cara, ni tu voz, ni el aprendizaje del escape y los que vienen tras de mi olvidaran tu cara y la mía y la del que
descifra estas líneas.-
¿Qué importa? - vanidad gritan del cielo - Y a la nuca del escape.
Busco mi huella. El latido que prosigue muere a tu boca y al seguimiento clandestino. Pero no me pidas torrente. Ese no será tuyo nunca, ni siquiera mío por que la clausula ya esta pronto a su cobranza. Si, se lo de la deuda. La deuda. La deuda. Me sigue y te sigue. Busquemos el escape al ultimo suspiro que precede a la muerte. Juguemos a las gotas que se separan, mientras ella busca la excusa que apague todos los dolores.
El escape la contempla distante, fría y mas hermosa que nunca. Se imagina que el verdadero amor solo se siente cuando los órganos sangran y todo la magia que se lleva en las venas no es suficiente. Vagara el escape buscando imaginariamente su pelo en otras testas, descifrara sus labios en otros labios. Imaginara posibles encuentros, posibles diálogos. Le inventara infinitos escritos y fragmentos de películas, que ya no verán juntos. Le narrara el escape y el tocar fondo numerando todos los ocasos, locuras, caídas de hojas, y hormigas, que estén a la altura de un momento musicalizado por Sigur Ros.-
Se imaginara en su mano la flor y el escape. La sentirá en la cocina preparando tallarines. Todo eso y más....